La miel es un ingrediente natural, usado en cosmética desde el inicio de los tiempos. Siempre se ha asociado con la pureza, la suavidad y la dulzura por alto contenido en azúcares disacáridos, de propiedades hidratantes y protectoras. El reducido tamaño molecular de este ingrediente permite su penetración hasta el interior de la fibra aportando un aspecto suave y brillante al cabello. Se ha comprobado también que la miel posee un efecto protector contra la excesiva y repetitiva exposición al calor de los secadores.